24 Ene LENTES DE CONTACTO diarias (o de un solo uso)
En los últimos años, cada vez más personas se han apuntado al uso de lentillas desechables, ya sean mensuales, trimestrales o incluso diarias. De hecho, aunque existen muchos tipos de lentillas, las lentes de contacto diarias son unas de las más utilizadas gracias a su comodidad y a los buenos resultados que ofrecen.
Si quieres saber un poco más sobre este tipo de lentillas, sus ventajas y desventajas, sigue leyendo, ¡te lo contamos!
¿Qué son las lentes de contacto diarias?
Hasta hace relativamente poco tiempo, las personas con astigmatismo no podían usar lentillas, o más bien, tenían muchos problemas con ellas. Recordemos que el astigmatismo está causado por una córnea irregular, por lo que ha resultado mucho más difícil estandarizar las lentillas para el astigmatismo que para otros defectos de la vista, como puedan ser la miopía o la hipermetropía. Además, por las características del ojo astigmático y las lentillas tóricas, estas se solían mover.
Sin embargo, gracias a los nuevos tipos de lentillas de usar y tirar, su uso para corregir los defectos refractivos se ha vuelto mucho más cómodo y sencillo. Hoy en día se han mejorado todos estos aspectos, disminuyendo su rotación y mejorando la oxigenación del ojo. De este modo, en la actualidad encontramos lentillas de uso diario que son válidas tanto para los ojos con miopía o hipermetropía como para aquellos con astigmatismo. Es decir, se adaptan perfectamente a la mayoría de pacientes con problemas de visión.
¿Cuáles son las ventajas de las lentes de contacto diarias?
Uno de los factores que ha influido en que estas lentillas se hayan convertido en uno de los tipos de lentillas más comunes, es que ofrecen muchas ventajas para la salud con respecto a otros modelos más tradicionales (las de uso mensual, trimestral o incluso semestral). Algunas de las principales ventajas que conviene tener en cuenta son las siguientes:
- La principal razón por la que muchas personas escogen este tipo de lentillas es la comodidad, ya que no necesitan cuidados adicionales. De hecho, se trata de una lentilla tan cómoda que, después de su uso, se desecha.
- Por otro lado, otra de las ventajas que presentan estos tipos de lentes de contacto es que disponen de una gran cantidad de parámetros, lo que permite que se ajusten perfectamente a cada tipo de problema visual o dioptrías por parte del paciente.
- Las lentillas diarias o de un solo uso sugieren una mejor higiene, al no ser necesario un mantenimiento diario ni haber un desgaste por el uso diario de una misma lentilla por diversos días o semanas. Las lentillas diarias, ¡no se limpian!. Todos los días usarás una nueva y libre de gérmenes.
- Ofrecen mayor libertad de movimiento para hacer cualquier tipo de deporte.
- No se empañan (como bien sabréis todos aquellos que habéis combinado gafas y mascarilla, es algo importante)
¿Quién puede utilizar las lentes de contacto diarias?
Las lentillas no son exclusivas para adultos. De hecho, cada vez es más habitual y extendido el uso de lentillas entre adolescentes y niños. La aplicación sencilla de las lentillas, la fácil adaptación gracias a los últimos materiales y el uso cada vez más frecuente de lentillas diarias (que no requieren de un cuidado); han hecho que la opción de las lentes de contacto sea muy normal entre los más pequeños.
Por el otro lado, tampoco existe una edad máxima: cada vez es más habitual el uso de lentillas multifocales para las personas que empiezan a tener presbicia, pero se resisten al uso de las gafas.
Consejos sobre el uso de lentes de contacto
- Mantén una correcta higiene durante su manipulación: Siempre, antes de ponerte y quitarte tus lentillas, no olvides lavarte las manos, ya que si no lo haces, algunas partículas pueden adherirse sobre la superficie de la lentilla y causar molestias que provoquen enrojecimiento, sensación de arenillas e incluso conjuntivitis.
- Se deben usar la lentillas durante el tiempo especificado, ya que el uso prolongado y continuado, sin un descanso adecuado, puede provocar diferentes problemas como sequedad o conjuntivitis crónica y, finalmente, desencadenar una intolerancia a las lentes de contacto.
- No dormir con las lentes de contacto puestas, porque al dormir con ellas se reduce la oxigenación de la superficie corneal y esto puede favorecer que al quitar la lentilla, la capa más superficial de nuestra córnea se quede adherida a ella y formarse lo que llamamos úlcera corneal.
- Se deben usar lentillas homologadas y que se adapten correctamente a tu córnea.